Grafitis contra un vertedero
Con los ojos cerrados, Fanzara es cualquier pueblo del interior mediterráneo. El rumor de un tractor, el eco de charlas de jubilados y algún coche. Pero cuando se abren, todo cambia. Decenas de dibujos colorean sus blancas fachadas. Y todo por una reivindicación.
Por la tranquila carretera que circula paralela al río Mijares, en Castellón, y sirve de ladera a la Sierra de Espadán deberían estar circulando hoy camiones de basura con destino a un vertedero. Ese era el plan de las autoridades de la provincia, encabezadas por el oscuro Carlos Fabra, presidente de la Diputación. Pero un puñado de vecinos de Fanzara, en cuyo término estaba la ubicación elegida, se opusieron y, tras años de lucha, ganaron las elecciones municipales del 2011 y frenaron la instalación de esa planta en este plácido valle....(más/more)